Me pone ir al mercado a comprar frutas tropicales, me pone beber vivo cuando estoy preparando canapés de caviar, me pone el caviar, me ponen las campanadas y las uvas de bote que no saben a uvas, que no saben a nada, me pone el cava de donde sea y me pone meter un anillo de oro en la copa, dejar las maletas en la puerta y entrar en el año con el pie derecho. Me pone besar a mi gente, que se pone guapísima y desearles lo mejor. Me pone recibir mensajes de felicitación pero no me pone no poderlos enviar. Me pone el turrón, los polvorones, me pone Nochevieja y sobre todo me pones tú.
Y os deseo a tod@s un año lleno de lujuria porque desear felicidad está muy visto.
Y le dedico el último post del año a Ángel Manzano Pérez, que fue asesinado el 11 de marzo de 2004.