Me está sentando mal el otoño. Quizá es la resaca del verano, quizá es el miedo al invierno. Me está sentando mal el otoño.
Dedicado a la memoria de Miguel Reyes Mateos, asesinado el 11 de marzo de 2004.
Segunda versión de este blog que no pretende más que dar rienda suelta a mis pensamientos, vivencias y ocurrencias de última hora. Por supuesto, tod@s invitados. Y no... mi padre no lo sabe.
Me está sentando mal el otoño. Quizá es la resaca del verano, quizá es el miedo al invierno. Me está sentando mal el otoño.
Racionalizar:
Ya sabes que tengo pasión por Budapest. Si, el grupo, no la ciudad. Nunca he estado allí. Yo soy de Londres, también lo sabes aunque no te apetezca volver esta navidad. Pues resulta que John Garrison, el compositor/cantante de Budapest me ha dejado que te cuente que aquí hay una canción inédita. A ver si te gusta tanto como a mí!
Me encantó la serie cuando vi el primer capítulo en algún canal de televisión por cable. No sé por qué. Sus personajes llenos de secretos, de apariencia, de una extraña sensibilidad vecinal... me gustaron. Ahora he descubierto que puedes hacer un test de 15 preguntas, ver qué personaje “eres” e incluso comprar la camiseta. Cómo se pasan los yanquis con el merchandaisin ese...
Lo siento de antemano, pero lo tengo que contar... esto no es apto para estómagos sensible. Y el que avisa no es traidor, es avisador.
Tenemos en los ordenadores de la empresa que están en red un sistema de mensajería instantánea tipo messenger que espero que ningún informático con nómina pueda leer. En especial aquel al que mi compañero de trabajo y servidor llamamos con calentura “el informático del amor”. Y es que mola tener otro gay en la empresa. Aunque me diga cosas como que huelo a vicio y me ofrezca compulsivamente bolis, post-its, y cualquier otro desechable de oficina que potencialmente pudiera necesitar.
Me gusta mi nueva almohada. Es de un material parecido al látex que no es látex pero no recuerdo cómo se llama. Me ha costado una pasta y no me importa, tengo superado el hecho de que en El Corte Inglés me venden lo que quieren. No llego al extremo de mi amigo Vicente, que fue a comprarse una colonia y los pechos de la dependienta hicieron que se llevara media docena a cuál más cara. Pero casi. Eso si, mi almohada huele muy bien y creo que dentro de unas semanas ya podré pasar una noche entera sin despertarme.
Antonio Glamour: Al final, siempre acertamos lo que sois, mientras el público eufórico cantaba Me gusta ser una zorra, de Las Vulpes.
Me he puesto un papel tapiz con la foto de una vaca y un primer plano de su cara. Y es que las he visto este verano por todas partes, incluso cada mañana en el espejo de mi casa. Le he puesto de nombre Antonia, me parece gracioso para una vaca. Mi (nuevo) compañero de trabajo se ha descojonado al verla, pero claro él se descojona de todo.