MI PADRE NO LO SABE

Segunda versión de este blog que no pretende más que dar rienda suelta a mis pensamientos, vivencias y ocurrencias de última hora. Por supuesto, tod@s invitados. Y no... mi padre no lo sabe.

jueves, junio 05, 2003

Tambores suenan en mi cabeza. Se van uniendo progresivamente a otros instrumentos de nombres impronunciables sacados de la naturaleza. Tengo 3 minutos y 54 segundos para trasladarme a Mali y olerla, sentirla, involucrarme. Ahora canta alguien que puede ser el jefe de la tribu o puede que no, pero me sugiere respeto. Estoy bailando en el centro de un círculo formado por todos los varones de la tribu que han tenido descendencia y se ríen conmigo, se mueven como yo, me imitan. Formando un círculo contiguo están las madres de los hijos de estos hombres, pero no hay nadie en el interior. Decenas de hogueras esparcidas por el asentamiento espantan a los malos espíritus que nos amenazan esta noche. La música va perdiendo intensidad. Las cuerdas han desaparecido con las extrañas flautas y ya quedan sólo los tambores del principio. Los tambores y un grupo de pájaros que canta a lo lejos anunciando el amanecer.