Llevo todo el día mirándome y no puedo creer lo que veo. Me he vuelto de color rojo, ¿qué va a ser de mi? Si por lo menos fuera azul, genial, podría hacerme pasar por un pitufo de la generación del cola-cao, pero ¡rojo! Me he puesto una camiseta blanca para disimular, y también se ha puesto roja. Los pantalones marrones se han vuelto rojos y no creo que haga falta que te cuente de qué color son mis zapatos.
MI PADRE NO LO SABE
Segunda versión de este blog que no pretende más que dar rienda suelta a mis pensamientos, vivencias y ocurrencias de última hora. Por supuesto, tod@s invitados. Y no... mi padre no lo sabe.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home